Las carretillas elevadoras son al operador de logística lo que al pintor el pincel. Popularmente conocidas como toros o montacargas, son herramientas imprescindibles para trabajos de carga y descarga. Toda carretilla elevadora debe ser conducida por una persona, aunque existen carretillas manuales y otras motorizadas, ya sea a través de combustible o con electricidad. Se trata de un permiso profesional que puede obtenerse en muchas autoescuelas.
Gracias a su capacidad de mover grandes cargas de peso, permiten agilizar los procesos de almacenaje, transporte y elevación de materiales. Ahora bien, es importante tener claro qué tipo de carretilla queremos utilizar dependiendo del almacén y los productos a manejar: carretillas elevadoras frontales, laterales o multidireccionales, apiladoras y con transpaletas, retráctiles, contrapesadas y 4×4. A continuación te explicamos una por una cada tipo de carretilla.
Índice
- Carretillas elevadoras manuales o transpaletas manuales
- Carretillas elevadoras eléctricas, las más silenciosas y ecológicas
- Carretillas elevadoras diésel: más potentes y veloces
- Carretillas elevadoras 4×4 a las que no se resiste ningún tipo de terreno
- Carretillas elevadoras contrapesadas para soportar grandes cargas
- Carretillas elevadoras retractiles: precisión en espacios pequeños
- Carretillas elevadoras automáticas sin conductor
- Curso de carretillas elevadoras, el más barato
- Preguntas frecuentes sobre las carretillas elevadoras
Carretillas elevadoras manuales o transpaletas manuales
Cuando hablamos de carretillas elevadoras manuales, habitualmente nos referimos a transpaletas manuales. Es decir, una herramienta esencial para manipular materiales sin necesidad de un motor. Por su diseño permiten movilizar hasta 3.500 kilos y son muy útiles para trayectos cortos, además de ser muy manejables. Otra de las grandes ventajas es que resulta económica, ya que al no tener un motor tiene menos averías y resulta más económicos.
Carretillas elevadoras eléctricas, las más silenciosas y ecológicas
Las carretillas con motores eléctricos de este tipo de carretillas permiten trabajar con mayor agilidad y son ideales para utilizarlas en espacios cerrados, dado que no emiten gases contaminantes y son silenciosas. Portan una batería que proporciona suficiente autonomía para trabajar durante horas que puede cargarse o sustituirse. Al portar un motor, la elevación permite mover mayores cargas.
Carretillas elevadoras diésel: más potentes y veloces
Al igual que las carretillas eléctricas, las carretillas que funcionan con diésel utilizan un motor que permite hacer desplazamientos más largos, además de mover mayores cargas de peso. Ahora bien, debe tenerse en cuenta que son más contaminantes y que las emisiones podrían resultar desagradables para espacios cerrados y sin ventilación. Ahora bien, permiten mayores cargas de peso y son muy efectivas.
Carretillas elevadoras 4×4 a las que no se resiste ningún tipo de terreno
Las carretillas elevadoras 4×4 o todoterreno están preparadas, como bien dice su nombre, para trabajar sobre todo tipo de terrenos. Son de una gran potencia y su principal ventaja radica en que los neumáticos permiten mayor movilidad en todo tipo de suelos, sin importar los desniveles que pueda tener el terreno ni se convierta en un obstáculo. Las hay de distintos tamaños y potencias, aunque resulta especialmente llamativo el hecho de que algunas carretillas todoterreno pueden subir incluso escaleras.
Carretillas elevadoras contrapesadas para soportar grandes cargas
El contrapeso es esencial para, como indica su nombre, contrapesar la carga que va sobre la parte delantera de la carretilla elevadora. Estas carretillas contrapesadas están motorizadas y son las más comunes, además de reconocidas por portar unas horquillas en la parte frontal, sobre las que porta la carga. Es la mejor opción para grandes pesos y operaciones en las que no se requiere demasiada precisión. Son ideales para trabajar tanto en interior como exterior y muy manejables y rápidas. Asimismo, se utilizan frecuentemente para cargar con camiones y la elevación suele alcanzar los 7 y 8 metros.
Carretillas elevadoras retractiles: precisión en espacios pequeños
Las carretillas elevadoras retráctiles son mucho más ligeras que las contrapesadas y alcanza mayores alturas, aunque no permiten movilizar pesos tan elevados. Su nombre se debe a que el mástil puede retraerse y desplazar el peso hacia el centro de gravedad de la máquina. Esto permite trabajar en espacios más pequeños y estrechos y un rendimiento muy bueno, además de gran altura. Este tipo de carretillas elevadoras retráctiles pueden ser tanto de carga frontal como de carga lateral.
Carretillas elevadoras automáticas sin conductor
Aunque pueda sonar a ciencia ficción, este tipo de máquinas no precisan de un conductor ya se utilizan en muchos almacenes. Ahora bien, deben ser programadas previamente para trabajar sobre espacios que no varíen. Las carretillas automáticas son una opción ideal para trabajos largos y repetitivos, aunque disponen de métodos de seguridad para identificar a las personas y no suponer un peligro. Es sin duda una carretilla que, aunque resulte más costosa, libera tiempo y costes de personal, además de resultar muy útil para trabajos nocturnos, por ejemplo.
Curso de carretillas elevadoras, el más barato
Para poder conducir una carretilla elevadora motorizada es necesario haber realizado y aprobado un curso. El carnet de carretillas elevadoras o carnet de carretillero otorga a quien lo posea la capacidad de manejar este tipo de maquinaria necesario para operaciones de carga y descarga en almacenes. Para obtener un certificado de operador de carretillas elevadoras es necesario matricularse en un curso como el que ofrece GO! Autoescuelas, el curso de carretillero más barato del mercado que no supera los 80 euros, por lo que resulta muy económico.
El curso de carretillero de logística también habilita a la persona a manejar plataformas elevadoras y consta de una parte práctica y otra teórica. El carnet de carretillero es obligatorio para el personal de mantenimiento, reponedores e incluso para algunos mozos de almacén. En definitiva, para cualquier persona que trabaje en almacén y se vaya a encargar del manejo de carretillas elevadoras.
Realizar un curso de carretillas elevadoras permite conocer la normativa de carretillas elevadoras y los requisitos para conducir carretillas elevadoras.
Preguntas frecuentes sobre las carretillas elevadoras
Los componentes principales de las carretillas elevadoras que permiten mantener el equilibrio de las máquinas son el mástil, para la elevación, el contrapeso, las horquillas, el tablero que las porta, el motor y el puesto sobre el que va el operador que maneja la carretilla.
Las carretillas elevadoras deberán pasar una primera ITV en caso de que haya que matricularlas, pero esta será la única vez, ya que al ser vehículos que no superan los 25 kilómetros por hora no deberán hacerlo de nuevo.
Las carretillas elevadoras deberán llevar una placa indicadora con los datos del fabricante, la capacidad máxima de elevación de la máquina y la presión de hinchado de los neumáticos.
Las carretillas elevadoras funcionan con un motor que permite propulsar la maquinaria y un operador que las conduce, siempre y cuando estas estén motorizadas.
Las carretillas van equipadas con un dispositivo antivuelco (ROPS) para los casos en los que se circule con una carga elevada, aunque también es aconsejable circular con el mástil inclinado hacia atrás y reducir la velocidad en las curvas.